¿Internet cambia nuestro cerebro?

Enciclopedia universal, redes sociales, juegos online y amigos “virtuales”... Internet está revolucionando nuestro día a día. ¿Su uso cambia nuestro cerebro además de nuestros hábitos? Explicaciones.

La investigación sobre el vínculo entre Internet y el cerebro aún está en pañales, pero ya está abriendo algunas vías.

Pasar tiempo jugando online, navegando de un sitio a otro, leyendo o manteniendo redes sociales tiene diferentes impactos en nuestro cerebro. Lejos de ser fijo, está en constante evolución gracias a su “plasticidad”.

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¿Qué papel juega Internet en la actividad de las neuronas?

Estimular tu cerebro con cosas nuevas hace que aparezcan nuevos circuitos neuronales: cambiamos la forma en que usamos nuestro cerebro. Esto es lo que nos permite aprender y adaptarnos a nuestro entorno.

Un experimento realizado en 2009 por un investigador californiano parece confirmar esta pista. Comparó la actividad cerebral de los internautas principiantes y experimentados cuando utilizaban un motor de búsqueda: los más experimentados activaban más áreas cerebrales, señal de que se habían formado nuevas redes neuronales.

Sin embargo, Google y otros motores de búsqueda a menudo son acusados ​​de reducir nuestra memoria. De hecho, ¿por qué molestarse en recordar, ya que todo está almacenado en la computadora?

Menos esfuerzo de memorización con Internet

"Las personas que se acostumbran a utilizar Internet como fuente de información y, de hecho, como memoria externa, tienden a hacer menos esfuerzos para memorizar", admite Jean-François Rouet, director del laboratorio Langage Mémoire et Développement Cognitif, en la Universidad de Poitiers.

Por lo tanto, la forma en que usamos la memoria a corto plazo está cambiando. Una de las consecuencias es que hay menos transferencias de información a la memoria a largo plazo, la memoria de almacenamiento que nos permite construir nuestros valores. »

Cuando la memoria a corto plazo se satura 

Además, nuestra memoria a corto plazo se satura más rápidamente con la Web: en cualquier momento, el internauta buscará información en diferentes enlaces, leerá los textos en diagonal, elegirá entre tal o cual contenido multimedia... Suficiente para sobrecargar su cerebro.

Esto también es cierto para aquellos que hacen malabarismos entre correos electrónicos, redes sociales como Facebook, sitios de documentación o la declaración de fuentes RSS: ser "multitarea" no ayuda ni a memorizar ni a concentrarse.

Investigadores de la Universidad de Stanford, California, formaron dos grupos de estudiantes, algunos solían hacer malabarismos entre diferentes actividades y otros afirmaban ser más bien monotareas.

Probados para la concentración, la mayoría de los "multitaskers" se distraían más fácilmente; estaban interesados ​​en información innecesaria para la tarea en cuestión.

Nuestro consejo: para entrenar tu memoria a corto plazo, oblígate a apartar la vista de la pantalla regularmente cuando leas y trata de recordar lo que acabas de leer.

Leer en pantalla es más complejo

Como hemos visto, la Web ofrece muchas tentaciones para buscar en otra parte. ¿Fralentiza nuestra lectura en pantalla? Con tabletas o teléfonos inteligentes, pasamos mucho tiempo con textos frente a nosotros y las áreas del cerebro que se activan son diferentes que con un libro. 

El cerebro utiliza las regiones del lenguaje, la memoria y el procesamiento visual; entre los usuarios de Internet, estas son las áreas del cerebro asociadas con la toma de decisiones y la resolución de problemas, simplemente porque en la pantalla, "la lectura es compleja, requiere un esfuerzo para saber si hacer clic o no en un enlace para avanzar en el texto, explica André Tricot, profesor de psicología e investigador del laboratorio Trabajo y Cognición de la Universidad de Toulouse.

El descifrado de hipertextos aumenta la carga intelectual de los lectores. Queda menos disponibilidad cerebral para retener lo leído. Por otro lado, esta lectura proporciona más información. »

Nuestro consejo:  a razón de una a dos horas diarias de navegación, el hecho de navegar ayuda a mantener y agudizar tu agilidad cognitiva, un poco como los crucigramas.

Internet, una posible baza en la escuela...

Memoria saturada, concentración perturbada, carga intelectual pesada... De ahí a preguntarse si los jóvenes podrían ver disminuir sus resultados escolares a fuerza de hacer malabarismos con múltiples pantallas, solo hay un paso que no debe darse necesariamente cruzado, si queremos creen los resultados de la encuesta europea "Pisa", realizada cada tres años entre miles de estudiantes de secundaria y preparatoria de 15 años, en los 34 países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo económico (OCDE), con el fin de evaluar la adquisición de sus conocimientos.

“Esta encuesta muestra que los jóvenes que utilizan mucho Internet como herramienta de documentación aumentan ligeramente su rendimiento académico”, destaca Jean-François Rouet. Los adolescentes que se limitan a las redes sociales, correos electrónicos, etc., no muestran ni más ni menos progresos en su aprendizaje. »

Siempre y cuando lo uses bien

Además, hacer un buen uso de Internet requiere saber identificar qué es justo y qué no lo es. De ahí la importancia de desarrollar su sentido crítico para elegir información, identificar y retener los sitios que le parezcan más confiables, en particular indicando sus fuentes.

Una vez más, tanto los adultos como los adolescentes parecen estar progresando. “Cada vez se ahogan menos en los buscadores, apunta André Tricot. En general, una persona que usa mucho Internet aprende a formular mejor su solicitud. »

En otras palabras, si se usa bien, Internet puede ayudar a mejorar los resultados escolares: en este caso, los jóvenes desarrollarían ciertas estrategias mentales que les permitirían organizar su conocimiento mejor que otros. De lo contrario, Internet no tiene ningún efecto... siempre que el joven no abuse de él.

Nuestro consejo: para desarrollar su sentido crítico,  hágase algunas preguntas sistemáticas antes de hacer clic en un enlace. ¿De dónde viene este sitio? ¿Por qué abrir este y no el siguiente?… Cuidado con los enlaces que aparecen en los primeros lugares o con los títulos de los sitios escritos en caracteres más grandes.

Cuando Internet es adictivo

Navegar compulsivamente por Internet puede llevar a la adicción. Estamos esperando la información o el mensaje emocionante que, cuando llega, funciona como una recompensa. Y te hace querer volver allí cada vez más... a riesgo de aislarte de la vida real. 

Además, la más mínima molestia, como un correo electrónico que no llega o la falta de tiempo para navegar por la Web, puede irritar a la persona, impedir que se concentre en su trabajo o en sus estudios.

Adicción a Internet: ¿manía o enfermedad psicológica?

 ¿Es una simple manía que se puede detener con bastante facilidad o una verdadera enfermedad psicológica?

Por ahora, los científicos no se han decidido. Según estudios realizados en psiquiatría, seguiría existiendo un rasgo común a todos los ciberadictos: además de esta adicción, padecen trastornos de conducta como fobia social o ataques de pánico.

Nuestro consejo: para evitar pasar demasiado tiempo en línea, use una alarma. Hay programas específicos que puedes instalar en tu computadora.

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Pedro Gonzalez Delgado

Me llamo Pedro Gonzalez Delgado y soy un apasionado de la escritura.Todos artículos los he escrito con pasión y dedicación.

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